Por Liborio.
Esta semana como de costumbre acudimos al Domingo de Misiones, en el sector Los Pinos, en la comunidad Casalta,
parroquia “Sucre” donde ya está casi
lista una de las bases de misiones que quedaran próximamente inauguradas en el
Distrito Capital, aquí en Caracas. Trabajamos allí con la Brigada Ayacucho en
una población marcada particularmente por la violencia y la pobreza extrema del
lugar. Pero este domingo para nosotros tuvo además una connotación especial y
es que trabajamos con un pequeño grupo de trabajo formado por angiólogos,
podólogos y médicos de otras especialidades que tributan al “Programa Buen
Vivir para el Diabético”. Con ellos recorrimos la angosta comunidad, en busca
de posibles beneficiarios y participamos en una consulta de una paciente
diabética que por suerte se encontraba sana y se le hicieron varias
recomendaciones sobre su estilo de vida, con este equipo también realizamos
pesquisas buscando criaderos de mosquitos, muy abundantes en esa comunidad por
cierto y con una baja percepción de riesgos pues es costumbre allí recolectar agua de lluvia para sus
necesidades perentorias pero sin las medidas sanitarias apropiadas para ello.
Con este pequeño grupo supimos que el programa
funcionando desde agosto del 2008 y que tiene presencia en 17 estados del país
y con amplias posibilidades de extenderse si así la situación lo requiere. El
programa además de brindar una intensa labor de cultura sobre la enfermedad a
los pacientes, trabaja directamente con un equipo multidisciplinario formado
médicos cubanos y venezolanos que realizan el tratamiento con Nepidermina, un
medicamento innovador de última generación que se le administra totalmente
gratis a los pacientes tributarios del programa- este medicamento es un
resultado del desarrollo de la biotecnología cubana y único por sus
características en el mundo. Para el trabajo cuentan además con el apoyo total
de la Misión Barrio Adentro quien capta la mayoría de los enfermos y además
colabora con una ambulancia para la
asistencia a las diferentes terapias. Nos comentaban que su mayor reto es tener
logística propia para su accionar e incluir más personas en el programa. De
todos es responsabilidad que se conozca los beneficios de esta terapia
innovadora que acrecienta el éxito y el prestigio de la medicina cubana.
La Nepidermina es
un resultado de la visión de Fidel de que el futuro de Cuba tenía que ser
inevitablemente de hombres de ciencia, de una ciencia al servicio de las
mejores causas de la humanidad. Qué
bueno es poder compartir este logro con otras tierras del mundo, muy
especialmente aquí en la tierra de Bolívar y Chávez donde se alzan sueños para
construir un mundo mejor y lograr el anhelo del redentor de las Américas de construir la suprema felicidad social para su pueblo.
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